Cómo pulir llantas de aleación de aluminio: guía paso a paso

Las llantas de aleación de aluminio pueden acumular oxidación, rayones y suciedad de la carretera con el tiempo, lo que opaca su apariencia. Si sigue las técnicas correctas de lijado y pulido, puede eliminar imperfecciones y restaurar sus llantas a un acabado brillante y similar al de un espejo. Esta guía detallada lo guiará paso a paso para dominar el proceso de pulido.

1.0 Preparación

1.1 Reúna herramientas y materiales

• Papel de lija: Utilice papel de lija de distintos tamaños. Comience con un grano bajo (p. ej., 80) para eliminar rayones profundos y avance hasta granos más altos (hasta 2000) para un lijado fino. Secuencia de grano recomendada: 80, 150, 320, 600, 1200, 2000.

• Pulidor: Para un pulido eficiente es imprescindible contar con una pulidora eléctrica o neumática. Elija una adecuada al tamaño y material de sus llantas.
• Almohadillas de lana y discos de pulido: Úsalos para aplicar compuestos de pulido de manera uniforme para lograr un efecto de espejo.

• Compuesto de pulido: Utilice un compuesto de aleación de aluminio especializado, comenzando con un pulido grueso y terminando con un pulido fino para obtener más brillo.

• Equipo de seguridad: Utilice guantes antideslizantes y gafas de seguridad para garantizar una operación segura.

1.2 Quitar y limpiar las ruedas

1. Desmontar las ruedas: Retire las ruedas del vehículo y colóquelas sobre un banco de trabajo estable.
2. Limpiar a fondo: Lave las ruedas con un limpiador o una mezcla de agua tibia y jabón para platos. Un cepillo puede ayudar a eliminar la suciedad, el polvo de los frenos y la cera vieja. Para manchas difíciles como el alquitrán, use un removedor de alquitrán. Enjuague bien y seque por completo.

Inspeccionar el Condición

• Arañazos y abolladuras: Los rayones menores se pueden pulir, pero los más profundos requieren ser rellenados y reparados antes de continuar.
• Oxidación: La oxidación leve se puede eliminar puliendo, mientras que la oxidación severa puede requerir tratamiento químico o repintado.

2.0 Proceso de lijado y pulido

2.1 Lijado grueso (lijado inicial)

• Elija abrasivo: Comience con papel de lija seco de grano 80 a 400 para eliminar rayones profundos y nivelar superficies irregulares. Técnica: Envuelva el papel de lija alrededor de un bloque o almohadilla de lijado para mantener una presión uniforme. Siga la forma y la veta de la rueda para obtener resultados uniformes. Tenga especial cuidado con los bordes y los radios para evitar lijar demasiado.

2.2 Lijado medio (refinamiento)

• Abrasivos de conmutación: Después de un lijado grueso, utilice papel de lija húmedo de grano 400-800. El lijado húmedo reduce las obstrucciones y mejora la eficiencia.
• Progresión gradual: Utilice una secuencia de grano 400 a 800, omitiendo los granos intermedios si es necesario. Inspeccione si hay poros o abolladuras durante este paso y rellene según sea necesario antes de continuar.

2.3 Pulido fino

• Configurar la pulidora: Cuando utilice una pulidora, ajuste la velocidad a 1500-2500 RPM para obtener resultados uniformes. Aplique el compuesto de pulido según las instrucciones del fabricante.
• Aplicar uniformemente: Utilice una almohadilla de lana amarilla para esparcir el compuesto, aumentando gradualmente la velocidad hasta un máximo de 3000 RPM. Asegúrese de que el contacto con la superficie sea uniforme para evitar que el brillo quede irregular.

Mano Pulido (Opcional):

Si se pule a mano, utilice un paño de pulido y un pulimento líquido. Extienda el pulimento de manera uniforme y frote suavemente. Evite aplicar una fuerza excesiva para evitar rayaduras.

3.0 Acabado y protección de espejo

3.1 Consigue un brillo de espejo

• Lijado final: Utilice papel de lija ultrafino (de grano 1200-2000) para el toque final, asegurando una superficie lisa y brillante.
• Consejos de pulido: Controle cuidadosamente la velocidad y la presión de la máquina para evitar pulir demasiado, lo que puede dañar los recubrimientos o crear un brillo desigual.

3.2 Recubrimiento protector

• Aplicar protector: Utilice un protector de metales o una capa transparente para proteger el aluminio de la oxidación. Aplique una capa fina y uniforme y déjela secar completamente.

4.0 Pasos finales

4.1 Detallando

• Bordes y radios polacos: Utilice herramientas pequeñas para acceder a espacios reducidos, evitando pulir excesivamente.
• Inspeccionar e instalar: Antes de volver a instalar las ruedas, compruebe que estén limpias e íntegras. Utilice una llave dinamométrica para fijar las ruedas en forma de cruz.

5.0 Mantenimiento y solución de problemas

5.1 Problemas comunes

• Rasguños persistentes: Vuelva a lijar con un grano más bajo o use un relleno para rayones profundos antes de reanudar el proceso.
• Residuo compuesto: Limpie con un paño suave y húmedo para eliminar los residuos.
• Brillo desigual: Asegúrese de que la presión y la progresión del grano sean constantes durante el lijado y el pulido.
• Oxidación: Para casos severos, utilice un removedor de oxidación de aluminio o realice una limpieza química.

5.2 Atención continua

• Limpie periódicamente las ruedas con un jabón suave y un paño suave.
• Evite el uso de productos químicos agresivos para preservar la capa protectora.

6.0 Conclusión

Si sigue estos pasos, podrá recuperar el brillo original de sus llantas de aleación de aluminio y mejorar la apariencia general de su vehículo. Un pulido y un mantenimiento adecuados garantizan que sus llantas sigan siendo atractivas visualmente y duraderas a largo plazo.

6.1 Aquí te dejamos una guía en vídeo tutorial, esperamos que te sirva de ayuda también.